Hay un hombre…
Hay un hombre que caminó despierto sobre el agua. Hay un hombre que con sólo tres años de vida pública logró que su mensaje traspasara todos los tiempos. Hay un hombre sereno, amoroso, caballero y servicial. Hay un hombre que puede decir Dios te bendiga, Aho! , Namasté, ya que tiene un corazón que saluda…