Un nuevo estudio publicado en la revista Neuroimage arroja nuevos datos sobre cómo cambia el cerebro humano en función de las tareas que le pongamos. La autora del estudio, Rebecca Chamberlain, quería averiguar si los artistas, especialmente los artistas plásticos, ven el mundo de una manera diferente. Al menos hay una cosa clara: su cerebro sí es estructuralmente diferente.
Chamberlain sometió a 21 estudiantes de arte a un escáner denominado Morfometría Voxel que calcula, a grandes rasgos, el volumen de las distintas áreas del cerebro. Después lo comparó con otras 23 personas que no se dedican a ninguna actividad artística visual (dibujo, pintura…).
El resultado es que el cerebro de los artistas muestra un desarrollo visiblemente mayor de la materia gris y la materia blanca en un área llamada Precúneo y en otras áreas del cerebro asociadas al procesado de imágenes y a la coordinación motora.
La gran duda es qué porcentaje de desarrollo es innato, y cuál se debe al entrenamiento y a la experiencia en un área determinada del conocimiento. Al día de hoy se ha demostrado que refinar nuestra técnica en un área concreta hace que el cerebro refuerce con el tiempo las conexiones en las áreas que procesan ese tipo de conocimiento. El estudio, al menos, ha servido para descartar la creencia popular de que los artistas tienen más desarrollado el hemisferio cerebral derecho. En las pruebas, el desarrollo corresponde a áreas determinadas de ambas mitades.
Chamberlain y su equipo confían ahora en poder utilizar la misma técnica para medir los cambios en el cerebro de los niños a medida que estos crecen y desarrollan excelencia en diferentes actividades.
seryhumano.com / Carlos Zahumenszky
Fuente: gizmodo.com