Terminada la tercera etapa en tierra colombiana, en la cual ningún equipo fue eliminado, las nueve parejas en carrera se dirigieron a Iquitos, Perú, una ciudad ubicada a orillas del Río Amazonas que no tiene conexiones terrestres y a la cual sólo se puede acceder mediante avión o embarcaciones. En esa tierra se vivió el desafío más “amazing» hasta el momento, donde el compañerismo, la fuerza y la determinación fueron fundamentales para seguir adelante.
El primer obstáculo a la vista implicó fuerza de brazos y piernas: subir a una palmera, cortar una rama y separar su fruto hasta llenar un saco. Los más atléticos de todos (Evelyn y Jorge) fueron los primeros en terminar, seguidos por las brasileras Débora y Renata, y por Manfred y Pierre, los muchachos de Costa Rica. Jéssica y Michelle, las venezolanas, quedaron en el octavo lugar.
En este episodio los concursantes podían elegir entre dos pruebas que se les presentaron: la primera opción consistió en buscar en el Mercado de Productores tres sacos de yuca y tres racimos de plátanos y repartirlos en moto a tres direcciones establecidas; la segunda, se trató de hallar cinco consonantes y tres vocales ubicadas en los techos de unos mototaxis. Al encontrarlas, el juez les dio los números que correspondían a cada letra para resolver un cálculo matemático. En síntesis, fue fuerza y observación, algo que tuvieron todos y cada uno para encaminarse a la recta final de la cuarta etapa.
Finalizado el desafío, los latinoamericanos que seguían debieron ir a la isla de la Comunidad Santo Tomás, donde cada equipo tenía que construir una embarcación capaz de soportarlos pues todos debían remar por el río Amazonas para llegar al Mirador Independencia donde se divisa la majestuosidad del lugar y más importante aún, donde la “Toya Montoya” los esperaba para dar los resultados. Jessica y Michelle llegaron en el octavo lugar aunque saltaron al puesto seis por penalidades a los otros equipos. Débora y Renata, las chicas guerreras de la tierra de la alegría se pararon, con lágrimas en los ojos, frente a la conductora para escuchar la peor noticia: fueron eliminadas. Sin embargo, se enteraron en ese momento que esta etapa no era eliminatoria. “Siguen todos” sonrió “La Toya”.
seryhumano.com
Nota de Prensa