La data científica no es conclusiva e incluso llega a apoyar visiones opuestas. Los expertos discrepan, los consensos se difieren.
A raíz de un tiroteo masivo como el de Parkland, todas las variables que influyen o pueden influir afloran en la opinión pública: el entorno familiar, posibles traumas, el fácil acceso a armas y, por supuesto, estimulantes de la violencia como muchos creen que son los videojuegos.
De un artículo mío en Univision Noticias tomo un fragmento sobre este tópico de discusión acalorada entre madres, grupos anti violencia y usuarios.
« ¿Hay relación entre juegos de video y violencia en la vida real?
Si le preguntamos a la American Psychological Association (APA), hay una relación. Luego de estudios y revisiones diversas, concluyen que “la investigación científica ha demostrado una asociación entre el uso de juegos de video violentos y todas las variaciones del comportamiento agresivo y la merma de comportamiento prosocial y empático.”
Luego de tiroteos masivos, dice el reporte, han sido los grandes medios y sus periodistas los que han puesto en el tapete la relación videojuegos-violencia. Desde Columbine en 1999, APA y otras organizaciones han abogado por la regulación de los videojuegos.
No obstante, la Corte Suprema en el caso Brown v. Entertainment Merchants Association de 2011 determinó que el “discurso violento” está protegido por la Primera Enmienda. Hay libertad de expresión violenta. Ante este dictamen APA contraatacó con más investigación y dice haber llegado a una conclusión sólida sobre juegos de video violentos y comportamientos idem.
De lo que no hay precisión es de si los perpetradores de violencia han sido empujados a ella solo o en buena medida por videojuegos, o es que iban a propiciar la violencia de todas formas. Hay que tener cuidado con las correlaciones. Por ejemplo, la mayoría de estos adolescentes participa en algún tipo de chat misterioso y secreto, pero tampoco hay ligazón necesaria entre violencia física y estos chats.
Pero si la pregunta se le hace a Whitney DeCamp, un profesor asociado de la Universidad de Western Michigan, contestaría que la evidencia no apunta a una relación entre videojuegos y violencia, o es “insignificante”. Los adolescentes videojugadores que han cometido crímenes o acciones violentas simplemente han podido tener predisposición a este tipo de actos. En una investigación con 6.567 estudiantes de octavo grado encontró que el uso de videojuegos no permitía predecir la violencia.
Por otro lado, hay otros factores que pueden influir más en el comportamiento agresivo: violencia en el hogar, pobreza, drogas o violencia general en los medios. No es una defensa de los videojuegos violentos, a este cronista le parecen algunos francamente virulentos y crueles, sino un esfuerzo por poner los porcentajes adecuados de causalidad entre videojugeos y comportamientos violentos que puedan llevar a un Columbine o un Parkland. No hay, pues, datos concluyentes.
seryhumano.com / Fernando Nunez-Noda
Tomado de Verifikado