Los niños deben estar preparados para afrontar las nuevas relaciones en la sociedad actual
El sistema escolar enfrenta un doble reto. Por un lado, promover competencias cognitivas en los niños y por el otro, que estos sean capaces de desenvolverse en la sociedad actual, que impone nuevas formas de convivencia.
Por eso, el rol de las habilidades socioemocionales en los niños juega un papel decisivo en su desarrollo, como lo señala Koji Miyamoto, economista del Centro para la Innovación y la Investigación Educativa de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) y promotor de que se evaluaran estas competencias.
En el marco del II Seminario Pedagógico Saber es Ser y Hacer, en la escuela de hoy de Editorial Santillana, Miyamoto explicó que “la educación en competencias sociales y emocionales es igual de importante a la formación en competencias cognitivas, y son precisamente aquellos sistemas educativos que promueven el desarrollo de estas en los niños y niñas los que mayores posibilidades tienen de lograr un éxito sistémico”.
De hecho, asegura que existe una correlación entre las habilidades sociales y emocionales con el logro académico, porque al mantener buenos niveles de motivación, autoestima y seguridad se desarrollan o fortalecen, por ejemplo, las habilidades en lectoescritura y matemáticas; incluso, en el aprendizaje de algún idioma, en el que la frustración representa el mayor impedimento.
De acuerdo con Miyamoto, en países como Singapur y Finlandia se refleja esta correlación, “ya que en estas naciones todos los actores que confluyen en los procesos educativos están motivados; no en vano obtienen los primeros lugares en las pruebas Pisa”, afirma.
Sin embargo, el economista señala que estas habilidades son subestimadas dentro de los sistemas educativos, “porque aún no somos conscientes de cómo fomentarlas entre los estudiantes. Lo ideal es generar situaciones cuya solución se dé de forma colaborativa; así se lograrán incentivar, por ejemplo, el trabajo en equipo y el liderazgo.”
seryhumano.com / Tatiana Lizarazo
Fuente: eltiempo.com