Para relatar los sucesos más sangrientos de la guerra de independencia venezolana, entre 1813 y 1814, y revisar la ideología subyacente al proceso, Uslar Pietri se centra en los avatares de los hermanos Fonta, Fernando e Inés, cuya genealogía se reconstruye mediante una ágil descripción de la vida colonial.
En la figura de Fernando se representan los vaivenes ideológicos del sujeto en crisis: de la vida inconsciente en el palacio familiar a la confrontación con una guerra cuyo sentido no se alcanza, pasando por la zozobra religiosa, el deslumbrado descubrimiento de la actividad intelectual y la inquietud política. Su conciencia titubeante encuentra un contrapunto hipervitalista en Presentación Campos, mulato rebelde que no asume su condición de esclavo y que, tras incendiar la hacienda de los Fonta y violar a Inés se une a las fuerzas realistas como medio de llevar a la práctica su voluntad de poderío.
No hay, sin embargo, lección: todos mueren al final salvo Inés, extraviada buscando una venganza que ya no podrá obtener. Al lado de la confrontación psicológica y moral, destacan en la novela las escenas bélicas, en un estilo cuasi cubista, y la presencia de algunos recursos narrativos (relatos insertos, tímidos flujos de conciencia, montajes paralelos, reiteraciones connotadas) que contribuyen a su modernidad.
En su primera novela, Uslar Pietri logra renovar el género histórico, anticipando una tendencia característica de la narrativa hispanoamericana de los últimos tiempos.
seryhumano.com / Daniel Mesa Gancedo