Por Yosmar Herrera
QAnon o Q: (abreviación de Q-Anónimo) es una de las principales teorías de la conspiración que detalla una supuesta trama secreta organizada por un supuesto «Estado profundo» contra Donald Trump y sus seguidores.
La teoría comenzó con una publicación de octubre de 2017 por un anónimo en el foro 4chan que usaba el nombre Q, supuestamente un individuo estadounidense, pero que probablemente más tarde se tratara de un grupo de personas, que aseguraba tener acceso a información clasificada sobre la administración Trump.
Según algo que encontré en internet: “«Q» es una referencia a la autorización de acceso utilizada por el Departamento de Energía requerida para acceder a los datos restringidos de alto secreto y la información de seguridad nacional”. ¡Piensen! Sí algo tan revelador fuera cierto, ¿estaría así no más al alcance de todos los internautas? Pues, uno nunca sabe…
La idea general de la presunta “conspiración” es que esta dice que hay actores liberales de Hollywood, políticos del partido demócrata y funcionarios de alto rango que participan en una red internacional de tráfico sexual de niños y que realizan actos pedófilos; y que Trump les está investigando y persiguiendo e intenta prevenir un supuesto golpe de estado orquestado por Barack Obama, Hillary Clinton y George Soros.
¿Les hace ruido el asunto?
Los medios de comunicación han descrito a QAnon como una «rama» de la teoría de la conspiración Pizzagate.
En agosto de 2018 en el portal de la BBC News Mundo, publicaba un artículo titulado “Qué es QAnon, la teoría de la conspiración según la cual Trump lucha contra la pedofilia y el «Estado profundo«” firmado por Simón Posada Tamayo.
En este artículo se hacía una serie de afirmaciones y referencias acerca de Q, que hoy puede que nos haga entender ciertos acontecimientos acaecidos con anterioridad.
Y a todas estas, ¿es peligrosa QAnon?
The Washington Post afirmaba que QAnon es «una consecuencia de la teoría de conspiración Pizzagate que llevó a un hombre armado a abrir fuego en un restaurante D.C. el año pasado«.
Si bien los seguidores de QAnon cometieron actos violentos en su nombre, causó preocupación entre el público que el autor del Pizzagate y el conductor del camión blindado en el puente cerca de la presa Hoover simpatizaran con sus ideas.
Pero, ¿quién puede medir las acciones de sus simpatizantes o seguidores?
Entonces, ¿deberían las redes sociales cerrar los grupos donde discuten los seguidores de estas u otras teorías?
Mark Zuckerberg, jefe de Facebook, respondió en ese entonces, a las críticas en su contra por no sacar de Facebook a InfoWars, un sitio en el que se divulgó información falsa sobre el Holocauto judío, la masacre de Sandy Hook y el Pizzagate.
Y el profesor de ciencias políticas en la Universidad de Miami, Joseph Uscinski, que ha escrito dos libros sobre teorías de la conspiración y fue entrevistado en aquella época por la BBC, compartió la posición de Zuckerberg y afirmó que sería «muy peligroso» eliminar los grupos de QAnon de las redes sociales. Dijo no estar seguro de que las plataformas de redes sociales tengan el deber de hacer algo.
«Pienso que la gente necesita empezar a comportarse mejor y, cuando se involucran en ideas erróneas, debemos tratarlos de manera respetuosa«, considera Uscinski.
Aún así, para julio de 2020 ya existe una purga de QAnon de las redes sociales; en un artículo de «Praying Medic» salió el cometario acerca de la censura que está haciendo Twitter contra todos sus usuarios que escriban sobre QAnon.
Twitter anunció el 22 de julio su intención de limitar la difusión de las discusiones sobre Qanon. Los pasos sin precedentes que planean tomar se describieron en una serie de tweets.
«Hemos sido claros en que tomaremos medidas firmes para contra el comportamiento que tiene el potencial de provocar daños fuera de internet. En línea con este enfoque, esta semana estamos tomando más medidas sobre la llamada actividad «QAnon» en todo el servicio.»
«Suspenderemos permanentemente las cuentas que tuiteen sobre esos temas que sabemos que están involucrados en violaciones de nuestra política de múltiples cuentas, coordinando el abuso en torno a víctimas individuales, o que están tratando de evadir una suspensión anterior, algo de lo que hemos visto más en las últimas semanas.
Además, haremos lo siguiente:
1. Ya no serviremos contenido y cuentas asociadas con QAnon en Tendencias y recomendaciones
2. Trabajaremos para garantizar que no destaquemos esa actividad en las búsquedas y las conversaciones.
3. Bloquearemos los URL (links) asociados con QAnon para que no se compartan en Twitter»
Un artículo del New York Times arroja luz sobre los planes de otras plataformas de redes sociales mientras lidian con la creciente influencia de Q.
«Facebook se está preparando para tomar medidas similares para limitar el alcance del contenido de QAnon en su plataforma, dijeron dos empleados de Facebook con conocimiento de los planes, quienes hablaron bajo condición de anonimato. Los empleados dijeron que la compañía ha estado coordinando con Twitter y otras compañías de redes sociales y planea hacer un anuncio el próximo mes. Facebook declinó hacer comentarios.»
El portal digital Divulgación Total tiene todos los últimos detalles de la censura a “QAnon”, en todas las RRSS, donde será evidente la modificación o supresión de las partes que no se ajusten a determinados planteamientos del establishment.
¿En qué posición queda la Libertad de Expresión con estas acciones?
¿Están temerosos a algo o a alguien en particular?
¿En dónde se encuentra la verdad de todo este asunto?
Lo que sí puedo afirmar, con toda propiedad es que el público merece estar informado y tiene derecho a que se investiguen los hechos, no solo los “rumores” o las “conspiraciones”, porque cuando “el río suena es porque piedras trae”.
seryhumano.com / Yosmar Herrera*
*Editora y CEO de seryhumano.com
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