“¡Aleluya!
Den gracias al SEÑOR porque es bueno, porque es eterno su amor”
Salmo 106:1
¡Aleluya!
Dios, Padre bueno, Tú tienes poder sobre el cielo y la tierra, eres el dueño de todo, gracias por tantas delicias, dones y alegrías que me has dado, por la fe y esperanza que tengo en Ti, que alimenta el calor que vibra en mi alma, que sea como sea mi realidad, en mí reina tu paz, gracias Dios.
Mi Señor, te pido me concedas la alegría de ver feliz a mis seres queridos, en especial de los que están lejos, en otras tierras, y que los conservo cerca, en mi corazón, que todos cumplamos la misión de agradarte, de hacerte sonreír.
Gracias por la fuerza que me has dado en cada momento difícil, gracias por iluminar cada día de mi vida, gracias por abrir puertas para mí, por ser mi guía y maestro, por ser mi Dios.
Gracias Dios.
Amén, amén, y amén.
¡DIOS TE BENDIGA!
Hoy te pido inundes mi corazón de Ti, mi Señor
Padre Nuestro
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
Padre Nuestro en latín – Pater Noster
Pater noster, qui es in caelis:
sanctificetur Nomen Tuum;
adveniat Regnum Tuum;
fiat voluntas Tua,
sicut in caelo, et in terra.
Panem nostrum cotidianum da nobis hodie;
et dimitte nobis debita nostra,
sicut et nos dimittimus debitoribus nostris;
et ne nos inducas in tentationem;
sed libera nos a Malo.
Enviado por Juan Kiklikian
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