El Entusiasmo es Dios dentro de uno mismo
Los niños suelen jugar a darse sustos. Cuando uno lleva un gran susto, generalmente se le acelera el pulso y el corazón pareciera salírsele por la boca, el flujo de la adrenalina es tremendo y hay que esperar un rato para recuperar el equilibrio. Esta energía tiene una similitud con la del entusiasmo. Uno produce…