Debo admitir que Frozen: Una Aventura Congelada no es el típico cuento de hadas a la que los estudios Disney nos tiene acostumbrados. Basada en un cuento de Hans Christian Andersen, Frozen nos relata la historia de una princesa llamada Elsa que tiene un don no muy convencional: todo lo que ella toca se convierte en hielo. Sin embargo, en medio de la ceremonia de su coronación como soberana de su reino, una noticia perturbadora la trastorna y convierte a todo su paradisíaco lugar en un lugar frígido y virtualmente desolador.
Es deber de su hermana Anna, quien sufre un percance con Elsa al comienzo de la película, ir a su rescate y hacer que la futura reina controle su don, o maldición, de convertir todo en nieve y hielo. Para esa tarea, Anna cuenta con la ayuda de un leñador llamado Kristoff y un muñeco de nieve de nombre Olaf, y los tres se embarcan en una aventura diferente y únicamente fria.
Esta pieza de animación nos ofrece unos giros tan inesperados que serían difíciles de explicar sin necesidad de arruinar la película, pero es muy seguro que tanto niños como adultos van a disfrutarla.
La animación es de primera línea y los directores Chris Buck y Jennifer Lee, bajo la atenta mirada del productor John Lasseter (el director de las dos primeras cintas de Toy Story), han hecho todo lo posible para mostrar un producto de buena calidad. Sin embargo, el punto débil son las canciones (acreditadas a Kristen Anderson-López y Robert López) que parecen haber sido hechas muy apresuradamente y terminan de forma brusca, haciendo que este musical no esté a la altura de La Bella Y La Bestia, Aladdin o El Rey León. Sólo una canción, “Libre Soy”, logra ser pegajosa a pesar, y lo vuelvo a decir, de su final brusco en la cinta.
En los créditos finales, si se logra disfrutar de esa melodía. La partitura musical incidental de Christophe Beck hace lo posible de mantener las canciones en pie, pero uno nota que no es una tarea fácil.
A pesar de todo, Frozen: Una Aventura Congelada es un buen entretenimiento de la fábrica Disney y es perfecta para las vacaciones navideñas.
Seryhumano.com / Luis Miguel Ramos