“Debería haber ido a esa reunión”, “no debería desconectar el teléfono”, “debería haber pensado en él más que en mí”. El diálogo interno e interminable que muchas mujeres tenemos con nosotras mismas, es por un sentimiento de culpa y arrepentimiento. Sin embargo, muchas reconocemos que algunas veces tenemos que dejar lo negativo a un lado y disfrutar del momento.
Aquí te traemos una recopilación de ideas para mantener tu mente en calma.
¡Disfruta de tu pijama favorita!
No hay nada mejor que quedarse en pijamas todo un domingo viendo TV y disfrutando de tus comidas favoritas. Tómate este tiempo para descansar y de compartir contigo misma.
Siéntete sexy
Ponte lancería sexy para que te sientas bien. No importa si nadie te ve, la gracia es que te sientas cómoda en tu propio cuerpo.
¿Por qué no?
Quédate un fin de semana repitiéndote la película que más te gusta. Si eres contenta viéndotela diez veces, ¡haz lo!
Placer y sólo placer
Tomate un baño caliente, dura horas bajo el agua y relájate.
Un día sólo para ti
No te sientas culpable si no limpias la casa o juegas con tus hijos. Un día libre para ti; ve a pasear con tus amigas, de shopping o simplemente no hagas nada. Todas tenemos derecho a olvidarnos de la rutina por un día.
No te sientas culpable
No te frustres porque no pudiste terminar todos tus quehaceres del día. Trata de tomar todo paso por paso sin que te estreses.
Sé una “chica mala”
Arréglate, ponte un vestido coqueto y sal a divertirte.
Holgazanea un poco
Quédate en cama toda la mañana un sábado, si quieres duerme todo el día o lee ese libro que te llama la atención.
¡Que nadie te presione!
No permitas que ni tu marido, ni tus hijos, ni tu suegra te presionen. Haz las cosas con calma, entre más te apures más te vas a estresar y harás las cosas de mala gana.
¿Comiste mucho? ¡Qué importa!
Date gusto de vez en cuando. Si subiste de peso porque te comiste una exquisita parrilla o unos tacos al pastor, no te ¡amargues! Lo que importa es que lo disfrutaste en el momento.
Tú primero
En lugar de preocuparte por satisfacer a los demás, también preocúpate por ti.
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Fuente: tecnonautas.net