Por Norayma González
El café es un ritual de percepción entre Lucas y Martha.
Lucas y Martha van al subterfugio del jueves de verano.
Ambos ante un subterfugio de besos, toman café turco: allí la mesa de olivo, recibe dos tazas, dos cucharillas que dibujan la vocal <<i>> en todo su centro. Dos vasos de agua evocan los cisnes de un lago.
Todos los jueves, se desliza en un solo sorbo un líquido negro, como el peso del cielo, en medio de sus bocas. Lucas y Martha con la mirada hacen una danza con la vida.
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Ambos, con la taza en mano, hurgan en una pregunta: _ ¿Cómo se besa un tibio sorbo?
Lucas, desliza sus ojos color caramelo por las mejillas de Martha, al unísono responde, _yo soy el sorbo y tú su percepción_.
Martha, entretanto, ha convertido el sorbo en un ángulo para su escritura. Lucas es el sorbo de un café.
seryhumano.com / Norayma González*
*Escritora
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