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“Ser libre no es hacer lo que a uno le place; es lograr el dominio de uno mismo.” Anónimo
Rich fue uno de mis profesores en la escuela de posgrado. Es un tipo admirable, pero nunca prestó mucha atención a la buena condición física. Un día, cuando tenía cuarenta y tres años, y se sentía ya viejo, acompañó a su hijo a una película de Bruce Lee. Al verlo, de repente se dijo: “Bruce Lee tiene una magnífica condición física para su edad; no hay razón para que yo no la tenga también”. Se dedicó a hacer ejercicio, empezó corriendo, luego practicando el ciclismo a largas distancias, ¡y ahora que tiene una buena condición física! Nos confió su secreto: “Eso me infundió autoconfianza, una sensación de sí mismo como persona física, con la capacidad de hacer cualquier cosa”.
Al avanzar en edad, uno puede mejorar no sólo físicamente – como Rich – sino en todos los aspectos. La clase de persona que usted llegue a ser va a depender sobre todo de usted. Sólo usted puede decidir reemplazar hábitos arraigados e ineficaces con nuevos que le den buenos resultados. Sólo usted puede crear su yo futuro. Sé que esto parece simplista, pero piénselo un momento: ¿no es verdad que es así?
En el argot psicológico, las personas llenas de vida saludable tienen un locus * interno de control, en lugar de los locus externos de control. Eso significa que, en vez de culpar a otros o al mundo en el que viven de sus problemas, son conscientes de que en casi todas las situaciones el individuo tiene -dentro de sí- el poder de influir en la dirección de su vida. Ése es el poder que es usted.
Si usted decide que quiere seguir creciendo sin cesar, volverse más y más interesante… e interesado, ¿qué puede haber que se lo impida fuera de usted mismo? Lo único que necesita es decidir que está listo y dispuesto a hacer el esfuerzo, y luego hacerlo.
Éste es el modo de empezar:
- Siéntese en silencio, con un diario en el regazo. Pregúntese: “¿en qué aspectos de mi vida quiero tener control?” Considere su buena condición mental, física y emocional, sus relaciones con amigos, pareja, familia, trabajo: cualquier cosa que tenga significado en su vida. Vaya anotando cada idea a medida que se le ocurran, como una “lluvia de ideas”.
- Para cada cosa que haya puesto en su lista, describa con detalles su idea del escenario ideal, del mejor modo posible de su vida.
- Luego, anote todo lo que pueda hacer para convertir en realidad cada uno de esos óptimos escenarios.
- Dé principio a la jornada.
Lo importante es que usted sea dueño de sí mismo. Así como Rich pudo decidir estar en mejor condición física, usted puede decidir tener mayor control de su vida.
*locus, en argot psicológico: punto, lugar
seryhumano.com / Dottie Billintong, Ph. D.