Sospechas que tu pareja te está mintiendo en ese preciso instante. Estás manteniendo una conversación por WhatsApp y sus respuestas son ‘raras‘. Tu instinto te avisa de que, claramente, te está engañando, pero no tienes pruebas fehacientes de que eso sea así. Por eso debes leer este artículo.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Cornell ha descubierto una serie de patrones en textos de mensajería que indican que alguien está mintiendo. Han analizado 1.703 conversaciones de esta conocida red social. Para llegar a sus conclusiones, separaban los textos que contenían mentiras de los verídicos. Entonces, analizaban el número de palabras, el género del emisor y los porcentajes de ciertos tipos de vocablos.
Descubrieron que las mujeres tienden a usar más palabras cuando están mintiendo, así como pronombres personales. Los textos de las mujeres que contenían mentiras eran de un promedio de ocho palabras, mientras que los verdaderos tenían nueve. La veracidad de los textos de los hombres era más difícil de demostrar, ya que todos sus mensajes contenían de media siete palabras.
Los investigadores determinaron asimismo que ambos sexos tendían a utilizar más frases no comprometidas, como «probablemente«, «posible«, «seguro» y «tal vez«.
Tema Relacionado: ¿Son las redes sociales dañinas para las parejas?
Además de todo lo mencionado, hay otras señales que indican que claramente tu interlocutor te está mintiendo. Son estas:
Tarda en responder
El mentiroso por WhatsApp tarda más en responder, edita más mientras escribe y piensa todo lo que dice. Al respecto, un estudio de la Universidad Brigham Young descubrió que las personas tardan más en responder a una pregunta si están mintiendo.
«Se ha comprobado que se tarda un 10% más de tiempo en escribir respuestas cuando son falsas, ya que son editadas muchas más veces y, casi siempre, son más breves de lo habitual«, puntualiza Tom Meservy, profesor de Sistemas de la Información y autor del estudio.
Mensajes más cortos
Como hemos dicho, los mensajes de los mentirosos son bastante más cortos de lo que deberían ser o de cómo lo suelen ser.
Lenguaje distante
Al mentir, intentamos alejarnos de lo que estamos diciendo, por lo que preferimos omitir los pronombres personales y hablar de terceras personas o cosas. Frases como «el tren se retrasó» o «la reunión no acabó a tiempo» puede ser motivo de sospecha, apuntan desde ‘Wikihow‘. Harías bien en preocuparte si alguien que siempre utilizaba la primera persona deja de hacerlo.
Si asimismo utiliza expresiones ambiguas como «casi seguro”, “probablemente”, “debería” o “quizá” podría ser un indicativo de que algo se calla.
Respuestas complicadas
Si le haces una pregunta sencilla como ‘qué hiciste anoche’, y te responde con cuatro párrafos de texto, y normalmente lo hace con uno… sospecha. Algunos piensan que cuanto más detallada sea su respuesta, más convincente será, pero en realidad suele ser al contrario. Te empieza a dar detalles de lo que cenó, con quién, con qué personas habló, a qué hora volvió a casa… y no lo hace normalmente… ¡mala señal!
Cambia de tema rápido
Esto es una técnica que utilizan sobre todo ellas. Si le escribes una pregunta y te intenta cambiar de tema o ni siquiera contesta a lo que le has preguntado, puede ser una señal de que está mintiendo. Esto también sirve para detectar mentiras mientras se tiene una conversación hablada.
No contesta lo que le preguntas
Mentir es incómodo y hace que uno se sienta mal consigo mismo, por eso si podemos evitar hacerlo, mucho mejor. Así que si no contesta, ignora la pregunta o contesta con un monosílabo para cambiar seguidamente de tema, es una muestra inequívoca de que está ocultando algo.
Demasiado adulador
Si tu pareja nunca te dice que te quiere por WhatsApp ni te da las buenas noches, y de repente un día lo hace… ¡sospecha! Sobre todo si este indicativo va acompañado de otros anteriormente mencionados. Si generalmente la persona es cariñosa contigo, tal vez no signifique nada, pero si repentinamente te dice todo lo que siempre quisiste escuchar…
No escribe como suele hacerlo
Todos tenemos un estilo a la hora de contestar un correo o mensaje, y si estamos mintiendo tendemos a cambiarlo. Si tu interlocutor no está escribiendo de la forma que suele hacerlo puedes empezar a desconfiar. La gente que se enrolla mucho cuando miente suele ser más escueta, y la gente poco habladora escribe más de la cuenta cuando lo que dice no es verdad.
Cambia de repente de tiempo verbal
Si estamos contando algo que ya ha pasado, utilizamos el verbo en pasado. Pero si estamos mintiendo, y nos estamos inventando las cosas sobre la marcha, es frecuente que nos equivoquemos y cambiemos el discurso a tiempo presente.
Ante todo, confía en tu instinto
Sin volverse loco, el consejo más recomendable es que confíes en tu intuición. Si hay algo que te chirría y las respuestas no son convincentes, escucha a tu instinto y a tu corazón. En el fondo sabes perfectamente si esa persona te está engañando o te está diciendo la verdad. No obstante, no está de más tener pruebas como las mencionadas en ese artículo. Cuantas más evidencias, mejor.
seryhumano.com / María Palmero