El Rebirthing fue descubierto de forma gradual por Leonard Orr, entre 1962 y 1976 a través de lo que él llamó “accidentes espirituales”. El Rebirthing es la respiración consiente y conectada de energía, entendiéndose como un proceso holístico de sanación que va de adentro hacia afuera, ya que involucra las dimensiones físicas, mentales y espirituales de cada persona. Este proceso se logra a través de las funciones más naturales del ser humano, tal como lo es la respiración y el pensamiento.
A través de la respiración consciente y conectada de la energía, la persona revive conscientemente momentos de bloqueo; liberando los recuerdos subconscientes del dolor primario y así poco a poco logra la integración que es hacer consciente una determinada situación. En el Rebirthing vamos más allá; se plantea que en esa profundización en la que nos daremos cuenta que somos comunes a una misma esencia; más sin embargo, cada individuo contará con diferencias que lo caracterizarán como un ser único. Con esto se quiere decir, que somos seres colmados de dones, cualidades y sabiduría, capaces de crear un sistema de creencias desde nuestra concepción, gestación y nacimiento.
Los primeros siete años de vida, juegan un papel fundamental en la construcción de las mismas; sin embargo, éstas se siguen construyendo a lo largo de nuestra vida. Este sistema de creencias está conformado por pensamientos positivos alineados con la naturaleza de nuestra esencia y también por creencias negativas que son las que nos limitan a pesar de nuestros deseos por cambiar. Los pensamientos negativos nos desconectan de nuestra esencia por lo que limitan nuestra existencia y le dan forma a nuestro ego, considerando al ego como una idea falsa que cada quien tiene de sí mismo; es decir, no constituye más que una ilusión que ejerce una gran influencia.
En la práctica de sanación con Rebirthing se adquiere la capacidad real de reconocer nuestros dones, con el objetivo de seguir evolucionando como lo merecemos; en confianza y con paz para abrirnos a recibir la energía divina de la mano del perdón y la gratitud.
La forma de relacionarnos y presentarnos al mundo está determinada por nuestra primera relación con la vida: el nacimiento. Nuestra primera respiración es nuestro primer acto de vida independiente después de nueve meses en el útero, recibiendo oxígeno a través del cordón umbilical.
Los beneficios del Rebirthing representan la voluntad de procesar la energía de otras personas en un acto de amor, por lo que ser Renacedor es una elección que hacemos para enseñar al prójimo a limpiar y equilibrar su cuerpo energético, siendo esto el regalo definitivo.
seryhumano.com / *Lcda. Belquis T Pérez Rodríguez
*Educadora – Psicología Positiva – Coach Vibracional – Thetahealing – Terapeuta en Renacimiento. E-mail: belquisperez24@gmail.com