No se lo plantee todo a la vez, busque compañía y otras claves que avala la ciencia para alcanzar metas
Se ha puesto un nuevo objetivo: bajar algunos kilos, dejar de fumar por completo o terminar por fin ese relato que tiene a medias. Esta vez lo va a conseguir porque ha leído el truco definitivo en un libro de autoayuda: visualizarse a sí mismo alcanzando el éxito. Craso error. Según este vídeo de Bite Size Psych, un canal divulgativo que realiza piezas de psicología a partir de los últimos estudios científicos, esta es una de las equivocaciones más frecuentes de quienes se proponen aumentar su fuerza de voluntad. Para los expertos, sentirnos triunfadores antes de haber logrado ningún mérito, es la mejor manera de engañar al cerebro para que deje de esforzarse.
Lo que sí puede hacer es compartir sus metas con otra persona. La motivación conjunta, según la pieza audiovisual que se encuentra sobre estas líneas, es una clave para evitar el desgaste y el abandono. Y busque amigos con propósitos comunes y ¡adelante!
A continuación acá te decimos con detalle las cuatro claves que tienes que conocer para aumentar la fuerza de voluntad:
1.- Tu voluntad es limitada
Los escáneres cerebrales confirman que cada vez que usamos la fuerza de voluntad el sistema de autocontrol del cerebro se vuelve menos activo. Esto explica por qué las personas que dejan de fumar son más propensas a pegarse un atracón de helado después.
¿Esto qué significa?
Muchas veces, la gente se motiva para arreglar todos sus problemas a la vez: quieren perder peso, dejar de fumar y hacer ejercicio al mismo tiempo. Pero si lo heces, tu voluntad se agotará muy rápido, y no será capaz de llevar a cabo ninguno de esos proyectos.
En lugar de esto, centra toda tu fuerza de voluntad en una de las metas.
2.- Aceptarse es mejor que culparse
Los sentimientos de culpa nos ponen de mal humor y esto hace que el cerebro encienda una búsqueda de recompensa, lo que nos provoca una satisfacción inmediata y nos hace sentir bien de nuevo. Pero desafortunadamente, esto rompe los objetivos a largo plazo, lo que nos provoca más sentimientos de culpa aún.
Así que es mejor perdonarte a ti mismo si fallas.
3.- La fuerza de voluntad es contagiosa
Los humanos somos seres sociales. Si vemos a alguien haciendo algo, tenemos el fuerte instinto natural de imitarle. Esto hace contagiosa la fuerza de voluntad.
Ver a alguien tratando de conseguir el mismo objetivo que nosotros nos motivará.
Si quieres alcanzar una meta, busca un amigo con el mismo interés y alcáncelo juntos.
4.- No te imagines teniendo éxito en tu empresa
Muchos libros de autoayuda aconsejan que te visualices alcanzando el éxito, pero presta atención a este ejemplo: Un grupo de investigadores seguía el proceso de unas personas obesas que querían adelgazar. Aquellas con mayores fantasías de perder peso fueron las que perdieron menos kilos.
La explicación es que, al fantasear, el cerebro entiende que ya hemos llegado a nuestra meta. De modo que si sientes que has hecho progresos, eres más indulgente contigo mismo.
Por lo tanto fantasear es agradable, pero deberías detener ese hábito inmediatamente, porque en realidad no te ayuda.
Así que los consejos de los que han obtenido la gloria antes que usted, por cierto, ignórelos.
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